• Sin lugar a dudas estamos viviendo los últimos días antes de la tan anhelada venida de cristo, clímax del proceso de vida de un hijo de Dios en la tierra. Es por esta razón que debemos hoy y con mas diligencia que antes, anunciar al mundo la esperanza de vida eterna que cristo les regaló en la cruz. Es importante saber que los instrumentos usados por Dios mismo, para la predicación del "evangelio" somos nosotros, aquellos simples vasos de barro, de quienes el Señor ya ha tenido misericordia. Por consiguiente como hijos de Dios, limpios, y con el llamado a predicar la buena nueva, debemos despertar a los que están dormidos, apurar e incentivar con paciencia de cristo a aquellos jóvenes que aun no llenan sus vasijas con aceite, animar a los hombres y mujeres e incluso a nuestras familias que en ocasiones se desalientan. ¿Cómo tratar con ellos? con oración y clamor a Jehová.
Dice su palabra en Isaías 55 versículo 11, “así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié. “ Amados y apreciados hermanos, sabiendo que nosotros no salvamos ni despertamos el espíritu de nadie,, y conociendo que únicamente el Señor obra en ellos, ¡ALEGREMONOS Y TRABAJEMOS EN SU OBRA CON FË!, ya que para la bendita gloria de Dios, su palabra, aquella que nosotros predicamos en calles y plazas, ¡Gloria a Dios!, nunca volverá vacía, por lo tanto si activamos en este campo en el nombre de Jesús, tendremos frutos.
• Para concluir quiero compartir con ustedes los siguientes versículos: Lucas cap. 5 ver. 4 y 5
“Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: Boga mar adentro, y echad vuestras redes para pescar. “
"Respondiendo Simón, le dijo: Maestro, toda la noche hemos estado trabajando, y nada hemos pescado; mas en tu palabra echaré la red. “
Felipe Aravena V.
No hay comentarios:
Publicar un comentario